Desde esta casa salen los grupos de Hermanas Misioneras Siervas de los Pobres para evangelizar los pueblos más pobres de la alta Cordillera, también atienden a muchos niños enfermos y cuidan de muchas niñas y jovencitas huérfanas o con serias dificultades económicas.
Acoge a los niños y niñas pobres más pequeños y a numerosos niños con minusvalías físicas y psíquicas de diferente grado; es también una casa donde diversas jóvenes pueden crecer en un clima sano bajo todo punto de vista.
Permite a unas 25 niñas que provienen de familias muy pobres, con grandes problemas familiares, poder estudiar en el colegio gratuito “Santa María Goretti”.
Acoge a unas 280 alumnas pobres. Las alumnas reciben también una formación técnica en las áreas de costura, tejeduría, cocina, cerámica e informática.
Es frecuentado por aproximadamente 100 niñas y adolescentes provenientes de familias pobres de la periferia de la ciudad de Cuzco.