“Este es de veras el Opus Christi Salvatoris Mundi (Obra de Cristo, Salvador del Mundo)” Fueron las palabras que san Juan Pablo II dirigió al P. Giovanni Salerno, el 5 de noviembre de 1986. De ahí que el nombre oficial de los “Misioneros Siervos de los Pobres” sea el de “Opus Christi Salvatoris Mundi”.
Somos más de 150 Misioneros Siervos de los Pobres (MSP), en representación de 15 nacionalidades, sirviendo diariamente a más de 1.000 niños, gracias a escuelas gratuitas, comedores, dispensarios médicos y talleres profesionales.
El Padre Giovanni Salerno nace en Gela (Caltanissetta-Sicilia, Italia) el 30 de enero de 1938. En el período 1957-1961, estudia Teología en el Seminario Arquidiocesano de Monreale (Palermo) y es ordenado sacerdote el 23 de diciembre de 1961. En agosto de 1968, el Padre Salerno parte con un grupo de Agustinos para la fundación de una Prelatura en la región andina de Apurímac (Perú). En este territorio de misión se encuentra frente a una situación verdaderamente alarmante: pueblos enteros viven aún “en la edad de la piedra”, en un completo abandono. Por este motivo, e inspirado en la Encíclica “Populorum Progressio” del Papa Pablo VI, el P. Giovanni funda a los “Misioneros Siervos de los Pobres” (MSP) para responder a esa continua llamada del Papa de ir al encuentro de la mayor parte de la humanidad que sufre el hambre, la injusticia y todo tipo de enfermedades
No vamos solos, sino que vamos como Iglesia, al encuentro de los más pobres, de ahí que nuestra misión sea llevar a los pobres todas las riquezas de la Iglesia, para hacer de ellos unos verdaderos prínciés, hijos de Dios.