NOV 24, 2021
La gracia de Dios, suscita en el corazón de cada persona la gran generosidad que constituye el ayudar a tantos pobres que lo necesitan, hemos podido repartir variados alimentos para el sostenimiento de muchas familias durante el mes de Noviembre.
La pandemia, no ha sido fácil para ninguno de nosotros. Pero, como siempre, los más afectados han sido los pobres. De ahí, que no podamos olvidarnos de sus sufrimientos y dolores.
Es importante, que volvamos a descubrir, la alegría de dar y de darnos. ¡Qué hermoso! Es cuando realmente tenemos la fe de que dando, se recibe. Cuando, en verdad, tomamos en serio, las palabras de Jesús, que nos recuerda que: “Hay mayor alegría en dar que en recibir” (Hch 20, 35) descubrimos que tales letras trascienden el papel sagrado y se hacen vida en nuestro ser.
Seamos generosos con los pobres y Dios no escatimará generosidad hacia nosotros.
Durante este mes, hemos repartido 10 kilos arroz, 10 kilos de Azúcar, 5 kilos de menestras, 1 kilo de sal, 5 latas de leche, 3 latas de atún, 14 kilos de papa, 3 kilos de cebolla, 3 kilos de zanahoria, 1 kilo de lechugas, 1kilo de queso y 20 panes por familia. Aproximadamente han sido 14 toneladas de alimento repartido, y más de 300 familias beneficiadas por lo que damos gracias a Dios, porque nos permite contemplar el milagro de la multiplicación de los panes en nuestros hogares.