No es extraño para nadie, que la pandemia del Covid-19 ha traído mucho dolor al mundo; por eso, nosotros “Misioneros Siervos de los Pobres” hemos querido dar una respuesta a todos en medio de esta pandemia. 

Para quienes nos conocen, sabrán que uno de los pilares de nuestro carisma es el sólido fundamento de la Adoración Eucarística, sin la cual no somos nada. Todo misionero está llamado a anunciar a Aquello que contempla. No podemos servir al pobre sin antes haberlo contemplado en la Eucaristía. 

Durante el año 2020 y casi todo el año 2021 logramos extender nuestra hora de Adoración Eucarística durante todo el día; en este año 2022, al volver a nuestros apostolados, dejamos la linda costumbre de tener Adoración Eucarística toda la tarde. 

Nos encomendamos a sus oraciones, para que podamos ser fermento de Cristo, en medio del mundo.