DIC 31, 2022
Es conocida la carta sobre los castigos de S. Juan Bosco. Si alguno de ustedes no la ha leído, le recomendamos vivamente hacerlo, ya que les ayudará a criar mejor a sus hijos.
Dentro de la carta, Don Bosco nos recuerda lo siguiente: “Muchas veces, el premiar a los comensales de la mesa más limpia, por ejemplo, tendrá el mismo efecto, si no mejor aún, que el castigar a los comensales de la mesa más sucia”.
Como “Misioneros Siervos de los Pobres” (MSP) el P. Giovanni ha puesto dentro de los estatutos que el modo de educar a nuestros niños es a través del “Método Preventivo” de S. Juan Bosco. Y, obviamente, dentro de este método se enmarca la carta antes citada. Queremos cumplir y llevar a cabo la enseñanza de Don Bosco, por eso nos preocupamos de aplicarla en la educación que damos a nuestros niños.
Uno de los aspectos que hoy queremos resaltar, es el de la premiación de ciertos niños. En vez de castigar a los más rebeldes (lo que no quita que en ocasiones hay que hacerlo, por el bien del niño) se intenta premiar a los que dan pasos por superarse. No se trata sólo de recompensar a aquellos niños que lo hacen todo bien, sino también a aquellos que lo intentan.
Nuestro director del “Hogar San Tarsicio” el P. Guido Huamán (peruano) cada mes premia a un conjunto variado de niños y les brinda un almuerzo un poco más especial y realizan un pequeño paseo por la ciudad de Cuzco. Con ello, el padre pretende animar a los niños a que deseen el bien y que no sólo se limiten a cumplirlo.